La Dama de Elche nos observa desde el cuadro, mientras López Tébar y yo bromemos. |
Dos leyendas: Eustaquio Segrelles y López Tébar |
López Tébar deja tenue el reflejo en agua del paisaje en el horizonte, convertido en miniatura |
MUESTRA DE ACUARELAS |
La Sala de Exposiciones del Círculo rebosante de visitantes y amigos del artista |
Dunas, olas, cielo y marisma. Camino hacia la espuma del mar, rompiente, en la orilla mediterránea. Arena fina, salada y dorada el viento mueve, formando playa, donde mis pisadas borra y esparce. |
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